Yo te mandaría un ramo de dedos de mano cariñosa con lirios blancos para que te acordaras del mar y del viento y de la arena que pisabas descalza, dejándote lamer por ella. Te enviaría un manojo de besos con una orquídea púrpura en el centro para que te acordaras de los susurros, de las palabras y de los brazos que abrazan. Con una tarjeta, no podía ser de otro modo, en blanco: un acertijo facilito.
Las flores muertas –todas las arrancadas lo son, por cara que sea la floristería dónde las compras, por bonito que sea el parque donde las cortas- endulzarán tu entierro con su empalagoso aroma. Pero te habrás ido y de poco servirá el evocar tus días, tus ojos y tus labios. Te habrás marchado y mis manos no podrán ya retirarte el pelo de los ojos ni sentir palpitar tu cuello bajo mis dedos. Te habrás marchado pero sé, estoy seguro, que finalmente nos encontraremos en otro lugar, un sitio dónde las flores olerán a vivo, dónde el dolor será una risa en la distancia.
volveremos a encontrarnos...y suena un eco perfumado y manos y flores y mar y arena y viento y y y y y y y y todo volverá a sentir.
ResponderEliminarPrecioso...
al fin solos: Me alegro de que te haya gustado y más viniendo de ti y conociendo tu buen gusto.
ResponderEliminarGracias
Me gusta también mucho tu blog. Sobre todo el literario. Felicidades.
ResponderEliminarFlores muertas ... sabes que lo pienso demasiadas veces cuando me acerco a oler flores hermoseando un florero?
ResponderEliminarMe gustan más las que hacen los dedos ;).
Recibir una orquídea púrpura rodeada de besos, es un regalo inolvidable.
ResponderEliminarUn saludo, Avatar
Me recuerda a un poema que me encantaba leer de chica.
ResponderEliminarMeláncolico, pero dulce.
Las manos que te regalan son como las flores que te acarician...
ResponderEliminarEl aroma que ambas dejan, es siempre único.
Un abrazo!
Flores para el adiós
ResponderEliminarMe ha gustado lo de retirar el pelo, sentir el cuello palpitando en las manos...muy humano...son esas imágenes las que se nos quedan tras lo que fue.
Glauka: No, no lo sabía pero no me sorprende en absoluto y sí, las de los dedos son más bonitas siempre. Gracias, dama blanca, un beso.
ResponderEliminarvaleria: ¿lo es? Confío en ello. Un saludo y gracias.
bettyylavida: ¿Qué poema? ¿recuerdas cuál era? Un saludo, gracias.
Simplemente Maria: Lo es. Y además los aromas permanecen, verba volant, "odor" manent, por parafrasear a una amiga común. Gracias, un abrazo.
lola gracia: Sí, por fortuna tienden a quedarse con nosotros para siempre. Un saludo y gracias